Tenía ganas de probar galletas sin huevo, además el lunes es el cumpleaños de mi niña, y uno de sus compañeros es alérgico, así que hacer galletas sin huevo era una de las opciones. Al final me he decidido por hacerle tarta en lugar de las galletas, pero de todas formas probé ésta receta de Sugar Mur:
INGREDIENTES:
150 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
75 gr. de azúcar glass
1 y 1/2 cucharaditas de aroma (yo le puse vainilla)
1/2 cucharadita de sal
250 gr. de harina
PREPARACIÓN:
Batir la mantequilla con las varillas eléctricas hasta obtener una crema fina. Añadir el azúcar glass a cucharadas sin dejar de batir.
Una vez esté todo integrado, añadir en este momento el aroma que queramos, por cada 100 gr. de mantequilla añadimos una cucharadita de postre y batimos de nuevo para integrarlo.
Mezclar ahora la harina con la sal y añadirla tamizada a la masa, integrándola con movimientos envolventes con una lengua de silicona.
Formar una bola con las manos, envolverla en papel aluminio y dejarla en la nevera como mínimo 1 hora o de un día para otro.
Horneamos a 170º de 12 a 15 minutos. Bueno, eso decía en la receta original, y también que no debemos dejar que se tuesten porque aunque salgan aún blandas del horno al enfriarse se quedan muy duras. Yo (otra vez, parece mentira) me lo creí aunque sé que mi horno siempre necesita unos minutos más, y las tuve 15 minutos, pero lo cierto es que aunque estaban muy buenas, no estaban todo lo crujientes que deberían haber quedado. La próxima vez, dos minutos más, como hago siempre.
Dejar enfriar sobre una rejilla y listos.
Para darles un poquito de gracia, aproveché a experimentar con plantillas:
Aunque obviamente son mejorables, a mi me parece que quedaron muy monas. Y también que necesito comprar más colorantes en polvo, ja, ja, ja...
Pues nada, espero que os gusten.